A lo largo de la historia, hemos visto diferentes tipos de espacios y edificaciones diseñadas para «alojar» los restos de personas fallecidas. Los egipcios diseñaron pirámides para recordar y honrar a los faraones y sus reinas. En la antigua ciudad de Çatalhöyük en Turquía, la gente solía enterrar a sus seres queridos debajo de sus casas.
En el mundo occidental, los cementerios modernos que vemos hoy en día parecían reemplazar a los viejos cementerios, resolviendo algunos de los problemas asociados con la Revolución Industrial y el rápido crecimiento de la población. A principios del siglo XIX, se establecieron nuevos cementerios lejos de las zonas densamente pobladas pertenecientes a los municipios e independientes de las iglesias y sus cementerios a su alrededor. Así, se ha logrado el objetivo de proteger a la población contra epidemias y otros problemas de salud.
Pero desde entonces han pasado muchas cosas y parece que van en aumento nuevos problemas.
«Demasiado pobre para vivir, demasiado pobre para morir»
«Demasiado pobre para vivir, demasiado pobre para morir»: así un periódico de la ciudad nororiental de Harbin tituló un informe en el que se quejaba de que los terrenos del cementerio ahora cuestan más por metro cuadrado que los apartamentos de lujo. – The Telegraph
Según informa el diario británico The Telegraph, para los chinos, es la forma de rendir homenaje a sus padres. Por lo tanto, están dispuestos a pagar el precio necesario para tener espacio disponible para sus seres queridos. Por supuesto, este enorme costo despierta resentimiento entre los chinos que han convertido a la industria funeraria en una de las diez principales «compañías con ganancias colosales» desde 2003.
En septiembre de 2013, la BBC, otro importante periódico británico, publicó un artículo con el alarmante titular: «El espacio de entierro en Inglaterra puede agotarse en 20 años». Al mismo tiempo, algunos proyectos y debates públicos han aparecido en ciertos grupos de nuestra sociedad.
Pero el único dato real que da alguna indicación real de que existe una tendencia en la industria funeraria a enfrentar la próxima crisis con cementerios es el aumento de métodos para acelerar la descomposición de restos humanos. Como indica la revista Time Magazine, somos parte de una sociedad móvil que encuentra métodos más adecuados como la cremación o la «cremación verde«, que son soluciones más ecológicas, económicas y sostenibles.
Entonces, quizás también deberíamos pensar en la creación de “nuevos cementerios” de una manera diferente a lo que hemos hecho hasta ahora. Quizás deberíamos estudiar y explorar las posibilidades de fusionar mejoras tecnológicas como la cremación verde mencionada anteriormente con nuevos espacios basados en la creación de vida, en lugar del “almacenamiento de la muerte”.
¿Qué te parecen los cementerios actuales? Háganos saber en la sección de comentarios. ¡Nos encantaría saber de ti!
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